Queridas familias,
Después de la dura excursión de ayer a Ampay hoy ha sido una jornada más tranquila, aunque a algunos voluntarios la caminata les ha dejado notables secuelas, como a Cris Marqués que se quemó los tobillos y los tiene hinchados.
Por la mañana los misioneros nos hemos dedicado a distintas actividades y labores en el orfanato y el convento.
En un descanso a mitad de mañana Josep y Arnau han tenido la brillante idea de comprarse unos gorros de lana Incas, según nos comentan les han timado cobrándoles una cantidad superior a la real.
Después de comer ha salido un grupo de voluntarios formado por Elna, Álvaro, Carme y Rosa que han ido de misiones a un pueblo perdido entre las montañas de la sierra peruana. En esta aventura nos cuentan que han atravesado un puente hecho a base de troncos de palmera que se balanceaba peligrosamente.
Otro grupo de voluntarios formado por Cris, Antón, Luis y una servidora han ido al río Pachachaca con una ranchera en busca de piedras para decorar la escuela.
Tras una suculenta cena, en la tertulia, Elna nos ha deleitado con un rap.
En fin familias, aquí acaba otra maravillosa jornada en el valle de la eterna primavera. Mañana nos espera otro duro día de trabajo.
Un abrazo muy fuerte,
Maria Argelich
PD: Un saludo de Luis a Diva, a quién echa mucho de menos.
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